Sneaker is reinvented

Las zapatillas de correr salen del gimnasio para convertirse en la clave de los mejores looks de Street Style. 

La moda tiene la extraña virtud de alumbrar un fenómeno inexplicable y estirarlo hasta el infinito, tomando caminos inesperados, inexcrutables casi. Basta solo con darse una vuelta por algunos de los blogs más conocidos para darse cuenta de que las zapatillas cumplían todos los requisitos para ser un hit del street style. Y ahí es donde reside el encanto de esta tendencia, en que se han incorporado en looks que, a priori, no encajan con ellas.

Inicialmente estaban reservadas a los deportistas y, en términos de estilo, poca gracia tenían. Luego, su comodidad fue conquistando a más de uno. Y si bien mucha gente empezó a usarlas fuera del contexto deportivo, estos zapatos no tenían -para ese entonces- la aprobación del mundo fashionista. Si se hubiera interrogado hace unos años a cualquier parisina sobre el tema, la respuesta hubiese sido que obviamente no usaba zapatillas, y que ni siquiera tenía un par en su armario porque: A- Las zapatillas son los zapatos anti-glamour por excelencia. B- Una parisina no hace deporte  (pero ese es otro tema).

 

Si hablamos de modelos, cualquier sneaker está aceptada, pero el efecto es directamente proporcional a lo arriesgado del modelo: mientras menos predecibles sean –y las de running no lo son en absoluto– mayor es el riesgo y mayor el poder del look. Las Free Run y Flyknits, de Nike, son las más populares entre las fashion insiders. Sin embargo, la tendencia de incluir deportivas en los looks de calle no es tan nueva como parece, en ciudades como Tokio es un outfit bastante fácil de ver. Las imágenes de street style lo confirman: las primeras invitadas a los desfiles en llevar zapatillas eran niponas. A partir de ahí, la globalización hizo el resto. Al final, se trata de una nueva vuelta de tuerca del streetwear, de un nuevo capítulo de la fructífera relación entre moda y cultura urbana, es la sublimación 2.0 del sport en clave lujosa.

Si vas a llevar zapatillas deportivas de forma chic, el punto es evitar parecer que estás yendo al gimnasio. Para esto  hay que añadir elementos anti-deportivos a tu look: una falda larga, una chaqueta formal, un buen pantalón chupin o un buena cartera de cuero.

Al no ser estos los zapatos más femeninos del mundo, es importante insistir en balancear el look a través de un buen collar, una manicure roja perfecta o una linda falda.

 

Usar las zapatillas sin medias les da un toque canchero. El pantalón remangado también es una buena opción.

Las zapatillas statement son quizás las más fáciles de usar, pues hablan por sí solas y no hay que cambiar gran cosa en la forma de armar tu look. Las Stan smith gozan de gran popularidad, y aparecen en clores clásicos como el blanco que podemos combinar con todo! Y para las que adoptan el último grito, está la tendencia Running. Si en un principio se creía que toda la gracia estaba en usar zapatillas cuyo lado deportivo había sido reinterpretado privilegiando una estética más urbana, toda la ironía de los fashionistas está ahora en terminar cualquier look con zapatillas REALMENTE deportivas. 

 

 

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